En Praga es fácil combinar turismo y bienestar. La Ciudad de las Cien Torres cuenta con numerosos e impresionantes monumentos históricos, y todo el casco antiguo está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Entre ellos destacan el bonito Barrio Judío, con sus calles torcidas, el imponente Puente de Carlos y el Castillo medieval de Praga, uno de los más grandes del mundo. Por la noche, puede mimarse en un hotel de bienestar de Praga. Un masaje tradicional, por ejemplo, o una relajante sesión en el baño de vapor.