El concepto es probablemente único en Múnich: el pequeño hotel se esfuerza por hacer realidad todos los deseos. En la cocina abierta, el chef prepara todos los platos favoritos. Y las icónicas campanadas del ayuntamiento de Múnich, que atraen cada día a tantos turistas, pueden disfrutarse cómodamente a la altura de los ojos desde la bañera exenta.
El hotel cuenta con 19 habitaciones.
Check-in: 15:00 horas | Check-out: 12:00 horas
Todas las habitaciones cuentan con wifi gratuito.