El Tirol es el destino de los turistas activos. Esquí, snowboard, senderismo o bicicleta de montaña: los Alpes tiroleses son empinados cuesta arriba y cuesta abajo. Los hoteles del Tirol se encuentran en rústicos pueblos de montaña con un convincente encanto rústico. Los mejores candidatos para ello son el Stubaital o el Tirol Oriental, donde la tradición y el turismo suave campan a sus anchas. Las legendarias estaciones de deportes de invierno con factor glamour son Kitzbühel e Ischgl. El mejor lugar para ir de compras y hacer turismo es la ciudad olímpica de Innsbruck.