Un hotel en la Kasbah es el lugar ideal para hacer turismo. El barrio palaciego de la medina de Marrakech está adornado con magníficos edificios: orientales con numerosos mosaicos decorados con minuciosos trabajos y tallas de filigrana sobre muebles de madera de cedro. Por ejemplo, el palacio Bahía, con sus magníficos patios interiores, o el palacio El Badi, que hoy es una imponente ruina de enorme piedra arenisca. En el mausoleo saadí, en cambio, varios sultanes han encontrado noblemente su última morada.