El Ticino, bañado por el sol, es conocido más allá de sus fronteras como el salón soleado de Suiza. Montañas pintorescas, prados alpinos en flor y arroyos verdes y cristalinos caracterizan al cantón suizo con sus pueblos y valles vírgenes. La vida de la jet-set tiene lugar en Lugano. Para disfrutar al máximo de los hoteles del Tesino, merece la pena visitar sus hermosos lagos de baño. En el lago Mayor, en Ascona y Locarno, se pueden encontrar románticos paseos lacustres entre palmeras y barcas de remos.