La Selva Negra tiene un encanto propio para ofrecer a sus visitantes: cumbres elevadas, lagos profundos y deliciosas especialidades regionales. Tras disfrutar de una excursión a pie o en bicicleta por uno de sus muchos parques naturales llega el momento de recompensarse con un trozo de pastel de Selva Negra o una buena copa de vino. La región del norte es particularmente ideal para familias, así como el parque de diversiones en Rust. El bienestar espera en la ciudad de Baden-Baden y en la cueva de sal más grande de Alemania, en medio de la Selva Negra. La región norte del lago Titisee y del lago Schluch es conocida por los deportes de agua en verano y los de nieve en invierno.
La mejor forma de descubrir la naturaleza aquí es a través del deporte. Los senderos para caminar y recorrer en bicicleta se encuentran en los alrededores de las cumbres más altas de la Selva Negra. Los lagos Titisee y Schluch reciben a muchos deportistas durante el verano. Aquí se puede bucear, practicar windsurf, rentar un bote o disfrutar de la playa junto al lago de un azul profundo. Durante el invierno, los turistas más activos eligen uno de los muchos ascensos, especialmente los de Feldberg. Desde sus 1493 metros de altura sobre el nivel del mar se puede disfrutar de una increíble vista sobre la Selva Negra y los Alpes.
Kinzigtal se sitúa en el centro de la montaña de media altura. Aquí todavía se lleva el famoso traje con el sombrero de pompones, y la tradición se vive en cada hogar. Se baila al ritmo de la música de las bandas folclóricas y durante el carnaval alemán los habitantes llevan máscaras llamadas “Larve”. No muy lejos de Offenburg se encuentra el pequeño pueblo de Ortenberg. Aquí, un castillo del siglo XIX se eleva imponente sobre los viñedos de la zona. El vino y los aguardientes de fruta que se producen allí pueden degustarse directamente en el pueblo y comprar para llevar a casa. El Europa-Park en Rust es el segundo parque de atracciones más grande de Europa. Más de un centenar de atracciones distribuidas en 17 temáticas hacen que esta visita sea única. Europa-Park es diversión para toda la familia.
Para ir de compras, lo mejor es visitar la ciudad de Nagold. En sus históricas casas de decorado entramado se emplazan pequeñas tiendas con artículos de moda. Mientras tanto, el Factory Outlet se encuentra a pocos metros. La cueva de sal más grande de Alemania, Salaveo, se sitúa a solo 10 minutos en coche. Aquí los visitantes pueden relajarse con un baño de vapor de salmuera, Qi-Gong o un masaje. Esta región es especialmente adecuada para realizar excursiones de senderismo y ciclismo con niños. Las pintorescas orillas del Karseen son ideales para descansar. Estos se formaron durante la Edad de Hielo y ahora son alimentados por el agua de la lluvia.
En la calle Lichtentaler Straße de Baden-Baden pueden observarse edificios históricos. Con una simple caminata es posible conocer las villas a la moda y las casas de entramado de madera. Numerosos cafés y restaurantes sirven como lugar de descanso y tranquilidad. El casino en el balneario, construido en 1824 al estilo de la Belle Époque, se encuentra entre los edificios más bellos de la región. El museo Frieder Burda expone arte contemporáneo, además, el edificio en sí fue construido con una arquitectura de estilo futurista. El museo de la ciudad, por otro lado, explica la historia del balneario en vívidas estaciones. En Baden-Baden es posible relajarse en medio de un manantial termal y curativo. La histórica Friedrichsbad del siglo XIX y la terma más moderna Caracalla Therme son alimentados por ella.
Adquiriendo la SchwarzwaldCard se obtiene acceso gratuito a más de 130 atracciones de aventura por 3 días. Opcionalmente se puede reservar, también, la entrada al Europa-Park en Rust.