¿Quién no quisiera vivir como los dioses en Francia? Ahora es posible: ¡Reservando uno de los hoteles más preciosos de Le Midi, en el sur de Francia! El fantástico clima mediterráneo, las delicias culinarias y la diversidad cultural forjada a través de siglos de historia y tradición garantizan unas vacaciones para despertar los sentidos y disfrutar de un destino diferente. Los paisajes componen un abanico de espectaculares vistas: desde montañas nevadas en los Alpes franceses, pasando por campos de lavanda en Provenza y las playas de ensueño de la Costa Azul, hasta el glamoroso encanto de ciudades famosas como Niza, Cannes y Saint-Tropez. Estas joyas turísticas hacen del sur de Francia un lugar único, cuya hermosura debe apreciarse en persona al menos una vez en la vida.
Los famosos artistas Cézanne, Picasso, Chagall y Vincent Van Gogh estaban hipnotizados por su belleza: Provenza obsequia a sus visitantes con preciosas flores y una explosión de colores y aromas. Además de campos de lavanda que parecen interminables, Provenza cautiva con sus hermosas costas y playas, como la “Plage de l’Espiguette”, la playa más extensa de Europa. Situada junto al río Ródano, La Camarga, con sus majestuosos caballos níveos, flamencos y toros, constituye uno de los paisajes naturales más hermosos de Europa. Otro atractivo indiscutible es el amplio mapa de senderos para excursiones: quienes quieren sentirse como los atletas del Tour de Francia y subir hasta la cima del Mont Ventoux tienen como premio una vista panorámica de ensueño. Las montañas de roca caliza Montagne Sainte-Victoire constituyen otro de los sitios más elegidos para practicar senderismo. Por último, pero no por ello menos importante, cabe destacar la calidad gastronómica y la oferta cultural de Provenza, que reflejan el estilo de vida del sur de Francia. Quienes disfrutan de la buena comida y de un vino excelente se sentirán muy a gusto al ver la variedad de los menús y las especialidades regionales. Las comidas típicas, con pescado, ostras y frutos de mar, sorprenden hasta a los comensales más exigentes. Para pasar las vacaciones en Provenza, se recomienda reservar en uno de los pequeños hoteles, ubicados en pueblos de montaña y en ciudades históricas como Avignon. Allì, los curiosos y los interesados en la cultura podrán disfrutar de la historia, la arquitectura y el arte, abarcando el teatro y la música folclórica de la región.
La Costa Azul, coronada por un sol brillante, es tan bella como su nombre: agua de color turquesa, extensas playas de arena blanca y 300 días de sol al año hacen de esta parte de la costa mediterránea un verdadero paraíso para los turistas. Con sus pequeñas y pintorescas bahías y sus islas lejanas, la Riviera Francesa se extiende hasta la frontera italiana en el este y hasta Cassis en el oeste. Los lujosos hoteles de la Costa Azul cautivan no solo con su elegante ambiente, sino también con el delicado trato francés y con su gastronomía de primera clase: más de 30 de sus restaurantes han recibido estrellas Michelin. Las boutiques de lujo flanquean los paseos y los yates descansan en los puertos. Las deslumbrantes metrópolis de Cannes, Niza, Saint-Tropez y Mónaco son símbolo de sofisticación y lujo: los amantes de la noche saben que aquí se encuentran los mejores clubs y propuestas para ir de copas. Entonces, no sorprende que la Costa Azul sea tan popular entre famosos de todo el mundo, que viajan allí para disfrutar del buen clima y el ambiente sofisticado. Las personalidades internacionales más prominentes se reúnen cada año para presenciar más de 400 eventos culturales, entre ellos, el famoso Festival de Cannes.
Occitania posee un sinfín de tesoros y una gran diversidad, tanto para los amantes de la naturaleza como para los que se interesan por la cultura. Desde la cima de los Pirineos, pasando por los viñedos de Languedoc-Rosellón y hasta la costa mediterránea de más de 200 km de largo, Occitania obsequia a los turistas con cada paisaje imaginable. La majestuosidad de la cadena montañosa de Mediodía-Pirineos marca la frontera con España. Entre sus pronunciadas quebradas y su cima de más de 3 000 metros de altura, son el escenario ideal para practicar senderismo o escalada. El Camino de Santiago y más de 850 km de senderos distribuidos en toda la región, como el de GR 10 que se extiende desde el Atlántico hasta el Mediterráneo, invitan a aventurarse y descubrir nuevos entornos naturales. El Parque nacional de los Pirineos es el favorito de Francia: su pintoresco paisaje montañoso se ve atravesado por idílicos valles, lagos y ríos, y cuenta con un sinfín de atractivos, como las placas de piedra caliza, las aguas termales y las cuevas de estalactitas y estalagmitas. Asimismo, Occitania es un reflejo de la riqueza histórica cultural de Francia. Pueblos medievales, castillos encantados e imponentes catedrales hacen de este un viaje emocionante. Ciudades históricas, como Toulouse, cuentan con hoteles históricos, románticos bulevares y muros que recrean un ambiente especial. En este lugar, la arquitectura reúne más de 2 000 años de historia, abarcando desde la Antigüedad hasta el Renacimiento, y ha sido nombrada patrimonio cultural de la humanidad por la UNESCO. Los mercados, festivales, fiestas culinarias y de viticultura destacan por su historia e invitan a conocer de cerca la forma de vida del Mediodía francés.
¡En la región Auvernia-Ródano-Alpes, las posibilidades para los turistas activos son infinitas! En el norte se sitúa el macizo del Jura, al oeste, el Macizo Central, y, al este, los Alpes franceses limitan con Suiza e Italia. El espectacular Mont Blanc tiene 4 810 metros de altura, que le otorgan el título de la segunda cima más alta de Europa y lo hacen el destino perfecto para los deportistas extremos. Las mejores pistas para practicar esquí y snowboard están en Val-d’Isère y en Morzine. Durante los meses de verano, estos lugares invitan a practicar senderismo, excursiones y ciclismo de montaña. Los hoteles de Auvernia-Ródano-Alpes cuentan con todos los servicios necesarios para recibir a los turistas activos y que desean estar en contacto con la naturaleza. Sus grandiosos lagos, como el Bourget, el de Annecy y el Lemán, ofrecen el entorno perfecto para navegar y hacer surf, mientras que las quebradas del Ardecha y el Loira son ideales para practicar kayak. Quienes viajan para relajarse, no dudan en visitar los balnearios de Thonon-les-Bains y Évian-les-Bains, donde reinan la tranquilidad y el bienestar. La capital Lyon es un imprescindible al viajar al sur de Francia, especialmente su casco antiguo, que ha sido declarado Patrimonio Cultural de la Humanidad por la UNESCO.
Son varias las rutas que llegan al sur de Francia. Lo más importante es planear con anticipación para poder aprovechar cada uno de sus rincones. La forma ideal de descubrir los pueblos del interior es dejarse llevar por su encanto y contagiarse del sentido aventurero de la Riviera Francesa.
Estos hoteles de ensueño son perfectos para unas vacaciones románticas en el Sur de Francia: Château Les Carrasses, pero también Hôtel Version Maquis Santa Manza así como Château de Montcaud.
Estos hoteles en el Sur de Francia también dan la bienvenida a tu querido amigo de cuatro patas: Fairmont Monte Carlo, Château Capitoul y también Village Castigno - Wine Hotel & Resort.
No siempre es fácil encontrar ese hotel especial para tus vacaciones. Sin embargo, los hoteles más hermosos en el Sur de Francia definitivamente incluyen Château Capitoul, así como Village Castigno - Wine Hotel & Resort o Hôtel La Maison de Crillon | Adults only.
En unas vacaciones en el Sur de Francia un hotel con una piscina es algo especial. Estos hoteles cuentan con una piscina: Château Grattequina Hôtel, Château Capitoul and Village Castigno - Wine Hotel & Resort.